Introducción
La osteotomía de la tuberosidad tibial (OTT) es una cirugía para corregir el movimiento anormal de la rótula, también conocido como mal seguimiento rotuliano. Esta condición puede causar dolor e inestabilidad. La cirugía tiene como objetivo mejorar la alineación, aliviar el dolor y aumentar el rango de movimiento de la rodilla.

Anatomía e Indicaciones
La rótula (patela) se desliza en un surco del fémur (hueso del muslo). La tuberosidad tibial es una prominencia ósea en la tibia (hueso de la espinilla) donde se inserta el tendón rotuliano. Cuando la rótula tiene un mal seguimiento, puede causar dolor y dañar el cartílago. La OTT se recomienda para dolor severo de rodilla por mal seguimiento rotuliano, inestabilidad, múltiples luxaciones o artrosis patelofemoral temprana que no ha respondido al tratamiento conservador.

Procedimiento Quirúrgico y Cuidados Postoperatorios
La cirugía se realiza bajo anestesia. Se hace una incisión debajo de la rótula, y se realiza un corte en la tibia justo detrás de la tuberosidad tibial. Este fragmento óseo se reubica para mejorar la alineación de la rótula y se fija en su lugar con tornillos o alambres. Después de la cirugía, se puede usar una férula de rodilla o muletas durante 6-8 semanas con restricción de carga de peso. Los cuidados postoperatorios incluyen mantener la pierna elevada, aplicar compresas frías, tomar medicamentos para el dolor y comenzar fisioterapia para fortalecer los músculos de la rodilla.

Riesgos y Complicaciones
Los riesgos incluyen infección, coágulos sanguíneos, rigidez articular, dolor persistente, entumecimiento y daño a nervios, vasos o ligamentos.