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Reparación quirúrgica de una fractura en la parte superior del fémur.

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Cirugía de cadera por fractura del cuello femoral

Cuando se produce una fractura en el cuello del fémur, se requiere una cirugía para estabilizar la fractura y restaurar la función de la cadera. Las opciones quirúrgicas pueden incluir la fijación con tornillos o el reemplazo parcial o total de la cadera.

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Introducción

La cadera es una articulación de tipo bola y cavidad (enartrosis) compuesta por la cabeza del hueso del muslo o fémur que actúa como la bola y encaja en la cavidad redondeada del hueso de la cadera o acetábulo. El cuello del fémur es la región justo debajo de la bola de la articulación de la cadera. 


Las fracturas del cuello femoral pueden desconectar total o parcialmente la cabeza femoral del resto del fémur. Estas fracturas pueden ser desplazadas, donde el hueso se mueve de su posición original, o no desplazadas, donde no hay inestabilidad del hueso. Estas fracturas pueden interrumpir el suministro de sangre a la porción fracturada del hueso. En casos de fracturas del cuello femoral gravemente desplazadas, la disminución del suministro de sangre impide que estas fracturas se curen.


Causas

Las fracturas del cuello femoral pueden ocurrir con:

  • Una caída menor o un giro de la cadera en personas mayores.

  • Pacientes con osteoporosis.

  • Traumatismos de alto impacto, como accidentes automovilísticos.

  • Individuos más jóvenes que no están acostumbrados a una actividad extenuante repentina o a un cambio en la actividad.


Signos y síntomas

Los síntomas de una fractura del cuello femoral incluyen:

  • Dolor que se irradia a la rodilla.

  • Incapacidad para soportar peso.

  • Acortamiento o rotación lateral de la pierna afectada.

  • Aumento del dolor en la cadera durante la rotación de la pierna.

  • Hinchazón en el costado de la cadera.


Diagnóstico

Las fracturas del cuello femoral se diagnostican basándose en un examen físico, sus síntomas y las circunstancias del accidente. Su médico ordenará una radiografía para diagnosticar una fractura del cuello femoral. Su médico también puede realizar otras pruebas de imágenes, como una resonancia magnética (RM) y una tomografía computarizada (TC), para obtener más información. Una imagen radiográfica de una curva de oración rota que muestra la relación de la cabeza femoral con el acetábulo indica una fractura del cuello femoral.


Tratamiento

El tratamiento de una fractura del cuello femoral dependerá de su edad y del grado de desplazamiento del hueso fracturado. Se sugieren enfoques terapéuticos conservadores para fracturas sin complicaciones e incluyen reposo en cama durante unos días, seguido de un programa de rehabilitación física después de 2 o 3 días. Su médico también puede recetar medicamentos para prevenir los coágulos de sangre, aliviar el dolor y tratar cualquier infección que pueda estar presente. Sin embargo, las fracturas del cuello femoral rara vez son lo suficientemente estables como para ser manejadas solo con terapia conservadora y generalmente requieren reparación quirúrgica. La cirugía para una fractura del cuello femoral se realiza bajo anestesia general o espinal.

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